¿Qué pasaría si un cocodrilo llamase a tu puerta para pedir perejil?

Éste es el tema de la redacción de esta semana. Me han encantado vuestras redacciones,tenéis una gran imaginación.
Ésta es la de Noelia:


¿Qué pasaría si un cocodrilo llamara a tu puerta
para pedirte perejil?
Esta historia comienza hace 2 años ,la tarde de un Miércoles mientras tocaba
el violonchelo .
•¡Dinnn dooonn!
Yo, me acerqué sigilosamente a la puerta con muchísimo cuidado y miré por
la mirilla y.... :
•¡ Pero qué ven mis ojos!,¡Es un cocodrilo!-grité asustada mientras me alejaba
de la puerta .Entonces, se oyó una vocecilla muy aguda que venía de la puerta
.
Y así decía :
• Tranquilizate chiquilla , soy tu vecina en el mundo de la fantasía .Y solo
quería preguntarte una cosa.
•¿Pero no me vas a comer?-pregunté asustada .
¡Tranquila!, a mí sólo me gusta el pescado –respondió la reptil segura de lo
que decía . Sin embargo ,yo tenía dudas aún . Pero me armé de valor y abrí la
puerta sigilosamente ...¡Era verdad , era una cocodrila! Lo que me extrañó
,era, que andaba a 2 patas , sabía hablar,llevaba puesto un vestido rosa, en
una de sus escamas llevaba un lazo morado y lo más raro es .... ¡Que llevaba
en sus dientes brakers!
Y... qué quieres- pregunté tímidamente.
A ver empecemos ;hola me llamo Estéfani . ¿Y tú cómo te llamas?-Dijo la
cocodrila sin ningún miedo.
Yo me llamo Noelia.
Pues quería preguntarte , si tenías perejil – me comentó muy dispuesta.
Lo siento pero aquí no hay perejil. Sólo lo encontrarás en una isla paradisiaca
muy lejana .
A continuación la reptil se echó a llorar , yo me acerqué cuidadosamente
para preguntarle qué le pasaba .
¡ Es que ahora no podré hacerme mi pescado a la plancha con perejil-exclamo
Estéfani llorando.
Pues sabes qué , si quieres nos vamos a Kalimujia a por perejil.-dije armada
de valor .
Si venga , vamos a hacerlo –dijo Estefani mientras se levantaba del suelo.
Pero .... Se lo tengo que preguntar a mis padres- dije entristecida .
Déjamelo a mí .
A continuación Estefani entró a casa:
-buenas tarde, ¿les importa que me lleve a su hija a Kalimujia?
Pues claro , no nos importa que te la lleves.
Mas tarde, Estefani y yo , fuimos al puerto a coger el
crucero de la fantasía que iba hasta Kalimugia. Durante
una larga semana y tres días estuvimos viajando hasta que llegamos a
Kalimugia.
Estefani y yo fuimos hasta el mercado de especias y compramos
perejil. Nos volvimos a Málaga. Dos años después,Estefani
y yo seguimos siendo amigas,nos llamamos todas las semanas para ver lo
que hemos hecho durante la semana.
FIN NOELIA CRUCES LARA 5oB



Redacción de Lucía Serrano:
 

28 DE DICIEMBRE DE 2009

Me levanté pensando que era el día 28 de Diciembre ,el día de los inocentes.

 De repente, escuché

un golpe en la puerta, será un vecino/a pesado, le dije a mi familia. Fui a abrir la puerta cuando di un gran grito que se escuchó en todo el bloque.

  Después cuando pasó unos segundos le dije a mis padres y a mi hermana mayor que dónde estaba la gracia.

  ¡Era un cocodrilo¡ el cocodrilo abrió la boca y pensé que me iba a comer pero me preguntó con una voz graciosa si tenía perejil.

Yo boquiabierta le miraba y requetemiraba viendo si era un disfraz, pero era de verdad. No me salían las palabras para decir que sí ,entonces fui a la cocina corriendo tropezándome para coger el perejil para llevárselo y me dijo educadamente, gracias. Yo que no pestañeaba, llamé a mi familia para que lo viera y se quedaron igual que yo, y el cocodrilo dijo: “Hola, me presento.Me llamo Rita Dolores Gómez de la Paz Consuelo Milagros, para los amigos Rita y vivo aquí enfrente y soy vuestra nueva vecina”. Nos quedamos como piedras pero después actuamos normal hasta que dijo que quería el perejil para hacer una sopa de ratones junto con lagartos.

Nos asustamos porque decía que necesitaba un toque especial también preguntó que si teníamos seguro y posteriormente se fue. Nosotros nos escondimos corriendo por la casa. Luego más tarde tocó, y le abrimos y dijo que si teníamos...(gritamos)”¡No por favor, no!”. Dijo “¿No tenéis verduras? yo pensaba que si” y se fue muy irritada. Nosotros nos alegramos ,tocamos la puerta y le dimos la verdura y se puso muy contento. Me fui a la cama pensando que en ese gracioso día nadie nos iba a comer.